Vitamina C – intravenosa

La vitamina C, también conocida como vitamina antiescorbútica o ácido ascórbico, es una vitamina hidrosoluble imprescindible para el desarrollo y crecimiento. También ayuda a la reparación de tejidos de cualquier parte del cuerpo, formando colágeno (el tejido cicatricial) en el caso de las heridas o subsanando el deterioro en huesos o dientes. La vitamina C también podría ayudar a curar resfriados comunes.

Beneficios de la vitamina C endovenosa

Además del estudio anterior, hay otros que avalan la eficacia de la terapia con vitamina C por vía intravenosa a dosis elevadas. Veamos, a continuación, con detalles cuáles son los principales beneficios de la vitamina C inyectable para la salud del organismo:

Mayor concentración en la sangre

El tratamiento de vitamina C endovenosa consigue concentraciones mucho más elevadas de este nutriente que ingiriéndola a través de alimentos o suplementos. De hecho, se alcanza un nivel en sangre 125 veces mayor que tomándola por vía oral. Esto quiere decir que el poder antioxidante que ejerce en organismo es muchísimo más amplio.

Inyecciones de vitamina C para el cáncer

Uno de los beneficios de la vitamina C inyectable más debatidos es el relacionado con el tratamiento del cáncer. Diversas investigaciones han demostrado que en grandes dosis, la vitamina C ayuda a reforzar el sistema inmune de los pacientes con cáncer, a potenciar el efecto del tratamiento recibido y a impedir el crecimiento del tumor. Puede ser útil, en definitiva, para mejorar la calidad de vida de estos pacientes, pero este es un tratamiento alternativo que siempre debe hacerse bajo prescripción médica.

Mejora la salud y belleza de la piel

La vitamina C es un gran antioxidante natural y, por ello, es también muy empleada en el campo de la estética y la belleza. Actúa activamente contra el envejecimiento de la piel, ayuda a prevenir y eliminar arrugas y estimula la formación de colágeno, lo cual se traduce en una piel visiblemente más joven, luminosa, tersa y hermosa.

Mejora y fortalece el sistema inmunológico

La vitamina C es un nutriente que ayuda en la producción de los glóbulos blancos, los cuales son los encargados de la respuesta inmunitaria. Por este motivo, se favorece el aumento de las defensas y se mejora la acción del organismo frente a cualquier bacteria, virus o microorganismo que pueda dañarlo.

Beneficios locales y sistémicos

  • Incremento de la energía corporal.
  • Evita la oxidación de las células y su envejecimiento.
  • Protege y repara huesos, músculos, cartílagos y dientes.
  • Regula la presión arterial.
  • Mejora las enfermedades articulares.
  • Mejora la circulación de la sangre.
  • Repara los vasos sanguíneos que han resultado dañados.
  • Reduce el colesterol malo.
  • Reduce los niveles de glucosa en sangre.
  • Mejora la salud visual, siendo muy efectiva en problemas de cataratas.

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